Martes de Sanidad

«Estoy completamente limpia del cáncer»
Lidia: «Desde hace un año y medio que estaba luchando contra el cáncer. Tenía un tumor en el pecho, estaban los ganglios tomados y tenía metástasis en el hígado. Durante todo este tiempo perseveré en las reuniones, jamás falté. Hace unos días, le llevé al médico los estudios y me dijo que el resultado indica que estoy completamente limpia del cáncer. La ecografía y la resonancia dicen que no se ve ningún nódulo, gracias a Dios. Sabía que Él me iba a sanar».
Tomaba siete pastillas, pero recibió un milagro
Saúl: «El año pasado tuve un infarto. Además, tenía 365 de diabetes y sufría de hipertensión. Pero hace dos meses que no tomo ningún remedio de los siete que tomaba. Controlé los niveles de diabetes y, en diciembre del año pasado, cuando tomaba la medicación, tenía 184. Cuando dejé de tomarla, empecé a tener 99, 112 y 97. Mi presión arterial también se reguló. El médico me dijo: “Estás hecho un pibe”. Me siento de diez. Estoy sano, gracias a Dios».
Participó de las reuniones y se sanó de anemia ferropénica
Karen: «Tenía anemia ferropénica. Me alimentaba, pero mis glóbulos no retenían el hierro. Por eso, tenía valores anormales. Entonces, empecé a participar de las reuniones de los martes y fui curada, gracias a Dios. Ya no tengo más la enfermedad.
Aunque me habían recetado hierro para tomar, la doctora me dijo que era ilógico que sanara en menos de un mes porque eso se cura en un año aproximadamente. Fue un milagro».
Si usted tiene una enfermedad, además de realizarse los tratamientos médicos correspondientes, tiene la oportunidad de participar de la Reunión de Sanidad todos los martes y determinar el milagro en su salud.
Participe a las 8 h, 10 h, 16 h o 20 h, en la Universal más cercana a su domicilio.
Si desea comunicarse con nosotros, puede hacerlo llamando al: (011) 5252-4070.
La Iglesia Universal del Reino de Dios aclara que todos los conceptos emitidos en esta página, como en el periódico y en su programación radial y televisiva, en modo alguno deben interpretarse en desmedro de la medicina, ni de quienes la practican. NO DEJE DE CONSULTAR A SU MÉDICO.