Imprudencia en el manejo, alcohol y muerte

Imprudencia en el manejo, alcohol y muerte

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Cada vez es más común ver distintos accidentes de tránsito reflejados en los medios de comunicación. El caso omiso a las señales de tránsito, el exceso de velocidad, el abuso del alcohol y las drogas hacen que, al menos 20 personas, pierdan la vida todos los días. Al año, miles de familias lloran la pérdida de un ser querido por una tragedia que podría haberse evitado. Lamentablemente los esfuerzos del Estado no tienen la incidencia esperada y el número de víctimas va en ascenso a medida que pasan los días.

El peligro del uso de celular
No hay duda que los celulares se han convertido en una adicción para la mayoría de los argentinos. Pero poco se habla del papel que juegan en el tránsito cotidiano. Según la asociación “Luchemos por la vida” esa distracción, al volante o a pie, agrega más peligro al tránsito cotidiano. Realizó un relevamiento que reflejó:

“Fueron 2720 conductores de automóviles particulares observados, los días hábiles, horario de 10 a las 18 h, septiembre 2017.

En Buenos Aires, por día circulan alrededor de 1,4 millones de vehículos. De ese total, 186 mil usan un celular mientras conducen, simultánea y constantemente, pese a la expresa prohibición de los art. 5.2.4, “e” de la Ley 2148 y 6.1.26 de la Ley 451 de la Ciudad de Buenos Aires, con el consecuente descuento de 5 puntos de la licencia y del art. 48, inc. “x” de la Ley Nacional de Tránsito 24449”.

Mientras que de los 3126 peatones observados, los días hábiles, en el mismo horario, el 15,1 del total cruzaban las calles usando el teléfono. Con el correr de 10 años la cantidad de peatones que tienen ese comportamiento aumentó más del 10%.

“Para los peatones, el problema real principal parece ser la distracción, así como les sucede a los conductores. Y en el tránsito caótico de nuestro país, este nuevo hábito compartido por peatones y conductores no hace más que empeorar la seguridad de todos en la vía”, asegura la Asociación Civil.

Una tragedia inesperada
Jonathan Elie Louis Jauneau era francés y estaba en nuestro país para celebrar que había terminado la carrera de Medicina. Sin embargo, murió luego de ser atropellado el domingo a la madrugada. Luis Alberto Schenone, un abogado de 30 años que vive en Recoleta, manejaba el Ford Fiesta blanco que lo mató en el acto.

A las 6:30 de la mañana el encargado de uno de los edificios de Libertador al 2200 avisó lo que había sucedido. Cuando llegó la policía encontró el cuerpo de Jauneau con tres amigos de Schenone a su alrededor. Ellos habían descendido del vehículo luego de que su amigo huyera después del atropello. Finalmente, el conductor regresó dos horas después. Las cámaras de seguridad del lugar permitirán que se sepa más sobre cómo se desarrollaron los hechos.

Muertes absurdas

Alfredo y Maricel Palavecino iban juntos en una moto por las calles de Adrogué, cuando un hombre los atropelló y los abandonó en el cruce de las calles Seguí e Yrigoyen. Aunque amigos de las víctimas intentaron seguirlo y detenerlo, solo lograron fotografiar la patente. Cuando quisieron alcanzarlo, el conductor maniobró amenazándolos con atropellarlos, los evadió y se dio a la fuga. La policía buscó el vehículo y se encontró con que el acusado de 36 años había escondido el auto en un taller mecánico.

Alfredo murió en el acto mientras que su hemana fue trasladada a un Hospital donde intentaron salvarle la vida. A pesar de dos operaciones no lograron estabilazarla y falleció.
Finalmente quien manejaba el auto fue detenido, pero el padre de Alfredo y Maricel reclamaba por el cuerpo de los hermanos, ya que en ese momento todavía no habían sido entregados: “Aunque sea en cenizas quiero traerlos de vuelta a casa. Yo le estaba preparando una fiesta sorpresa (a su hijo, ya que estaba a días de cumplír años) y ahora tengo que preparar un velorio”.

Los padres se despidieron de ellos en redes sociales con mensajes desgarradores.

La cantidad de personas que perdieron la vida en accidentes de tránsito aumenta día tras día. Cada accidente es un golpe que destroza a los seres queridos de las víctimas y los deja sin consuelo. Sin embargo, es posible que su familia tenga la protección de Dios y sea librada de la tragedia. Participe este domingo a las 9:30 en el Templo de la Fe, Av. Corrientes 4070 – Almagro o en la Universal más cercana a su domicilio.