El obispo Macedo sigue en su viaje misionero por Argentina

El obispo Macedo sigue en su viaje misionero por Argentina

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El encuentro especial se realizó el 4 de octubre. Sepa más

El obispo Edir Macedo le dio seguimiento a su viaje misionero por Argentina, y estuvo en el Templo de los Milagros, la catedral en Buenos Aires, el 4 de octubre. En esta reunión especial, abordó el tema sobre los peligros del corazón en la relación con Dios. El obispo Júlio Freitas también estuvo presente.

¿Qué es entregarle el corazón a Dios?

«El secreto para tener una nueva vida con Dios, una nueva mente, es entregar el corazón. Parece fácil, pero no lo es. Cuando usted Le entrega su corazón a Dios, Le está entregando su voluntad, su futuro y su presente por toda su vida. Por eso, cuando esa entrega es verdadera, instantáneamente, el Espíritu Santo abraza su vida para siempre», enseñó el obispo Macedo.

Dios ve el interior de las personas:

El obispo Macedo también aclaró que hay personas que no son respondidas por Dios a causa de lo que guardan en su corazón.

«Dios es muy simple, pero nos exige sinceridad. Él conoce nuestros errores y sabe que no merecemos nada de Su parte, pero lo que ve no es lo que nosotros vemos. El Altísimo ve los deseos de nuestro corazón. Muchas personas han dado sus ofrendas en el Altar, han sido buenas, caritativas y religiosas, pero Dios sabe lo que sucede dentro de ellas. Si la persona no es sincera, no recibe nada de Él.»

Lo que Dios espera de nosotros:

· «Cuando nos casamos por amor a una persona, le damos todo nuestro corazón. De la misma manera, Dios quiere su corazón por entero, completo. Él sabe lo que sucede en su interior, por eso, si está dividido, no lo aceptará», explicó el obispo.

· El problema es lograr luchar contra la propia voluntad: «No es necesario merecer recibir al Espíritu Santo, sino darle el corazón. No es fácil dar todo, porque nuestro corazón es naturalmente rebelde, malo. Sin embargo, el que da todo, recibe. Fue lo que le sucedió a Pablo, quien dijo: “Y ciertamente, aun estimo todas las cosas como pérdida por la excelencia del conocimiento de Cristo Jesús, mi Señor, por amor del cual lo he perdido todo, y lo tengo por basura, para ganar a Cristo…”, Filipenses 3:8».

La importancia del Espíritu Santo:

El obispo Macedo añadió que el Espíritu Santo hace que seamos plenamente felices. Él nos orienta sobre nuestros caminos y quiere habitar dentro de nosotros, incluso en los momentos difíciles. De esta manera, dondequiera que estemos, estará con nosotros. Nada puede llenar nuestro interior, solo Él. Por eso, el apóstol Pablo se desprendió de todo para poder conocerlo.

A continuación, vea la galería de fotos de algunos momentos del encuentro: