El alma y los sentimientos

Es en el alma que nacen los deseos, los sentimientos, … Cuando vivimos por la fe, contrariamos nuestra alma. Ya no somos dirigidos por nuestros deseos, sino por la voluntad de Dios; por la obediencia.
Es en el alma que nacen los deseos, los sentimientos, … Cuando vivimos por la fe, contrariamos nuestra alma. Ya no somos dirigidos por nuestros deseos, sino por la voluntad de Dios; por la obediencia.