Domingo del encuentro con Dios

Sandra esperó a que sus padres se fueran a dormir para sacar la botella de alcohol que tenía escondida. Todas las noches era lo mismo: Era el momento en el que ella recordaba su niñez, cuando vió por primera vez a su papá alcoholizado, y la tristeza que sentía. Hacía mucho que estaba depresiva, atormentada.
Después de la muerte de sus padres todo empeoró, se sintió abandonada, sin rumbo. No tenía ganas de salir de su casa y cuando lo hacía veía a su madre fallecida. La situación parecía no tener solución…
No desista, su sufrimiento se puede terminar cuando usted tenga un encuentro con Dios, participe este Domingo a las 9.30, 15 y 18 hs en Av. Corrientes 4070, Almagro. Busque un Cenáculo más cerca aquí.