¿Por qué la mayoría de los sueños no son realizados?

Porque la mayoría de los sueños están proyectados en el corazón. Cada vez que una persona proyecta sus sueños en el corazón, se sujeta a los sentimientos de su corazón para realizarlos.
El corazón es falso y perverso, él es solo una fuente de sentimientos, emociones, fantasías, ilusiones… Él vive en dependencia de las emociones más fuertes… Él se alimenta de fantasías, ilusiones y entusiasmos. Si no hay todo eso se siente deprimido, triste y disgustado.
Todos sabemos que para la realización de un sueño es necesario enfrentar luchas, problemas, dificultades. Significa decir que la realización de un sueño requiere fe, lucha, perseverancia y sacrificio.
¿Se puede exigir de la fuente de las emociones (corazón) la fe persistente para la realización de un sueño si esta fuente es sólo un sentimiento inútil e ilusorio? Por supuesto que no. Sería como preparar al niño para la guerra.
El corazón es débil, indefenso, inconsistente e inadecuado para hacer frente a cualquier problema. No fue hecho para luchar, sino para sentir.
Por lo tanto, el corazón no es capaz de inspirar la dirección correcta, es incapaz de proyectar algo viable e incapaz de tomar la decisión correcta.
La orientación del corazón siempre se basa en las circunstancias. Es decir, se orienta de acuerdo a los sentidos de la vista, oído, olfato, tacto, gusto… El necesita «sentir» algo para tomar la decisión. Es decir, depende enteramente de las circunstancias, para mantener vivos sus sueños y esperanzas.
Sin embargo, las circunstancias no son favorables a los deseos del corazón. ¡Al contrario! Siempre que el corazón proyecta un sueño y espera la buena «suerte» para realizarlo, solo aparecen problemas para afectarlo y disgustarlo.
Pero cuando los sueños están proyectados en el espíritu, en la mente, en el intelecto y están dentro de la voluntad de Dios, entonces con seguridad ellos se realizarán.
“Porque hay esperanza para todo aquel que está entre los vivos; porque mejor es perro vivo que león muerto”. (Eclesiastés 9:4)
Si usted también tiene un sueño, que a sus ojos parece imposible, pero usted cree y quiere luchar para alcanzarlo, una su fe con la de los obispos y pastores de la Universal. El próximo 15 de mayo, todos clamarán a Dios para que ese sueño se haga realidad.
Para saber más sobre este propósito, busque una Universal más cercana a usted.